Caso #2: Dr. Jekyll and Mr. Hyde

Insisto.

Llevarme a comer perros en una first date no es (nor ever will be) una forma de causar una impresión.

Necesito revisarme. Debo estar enviando algun tipo de señal equivocada y probablemente en frecuencia AM como para darle a entender a un pana que "uno con todo" es el elemento ideal que depertará la chispa entre nosotros.

Aqui entre nos...Lo acepto! Me encantan! Soy amante bandida de un asquerosito y conozco cada esquina, cada perrero, cada salsa, cada sobrenombre... pero no se vale que me arruines la faceta Cenicienta antes de las 12. Espera por lo menos a que tengamos unas semanitas saliendo. Espera a que nos echemos una rumba el próximo fin y a golpe de 4.30 am yo misma te pida que me lleves a la calle del hambre. Espera a que al día siguiente me haga la loca y te diga "no se que me pasó, creo que tomé demasiado, que pena contigo, no fue mi intención comerme dos, normalmente no soy así".

Pero no....

Tenias que ahorrarme la actitud de Valencianita, no?

Next time déjame hablar sobre gastronomía, sobre viajes, libros y películas. Déjame estirar mi dedito chiquito mientras tomo un vino tinto y te mareo con lo que mas o menos he aprendido de la enología. Dejame contarte de mi crucero por las Islas Griegas o la vez que visité India. Dejame ventilar mi High Society de vez en cuando y verás en vivo y directo la metamorfosis de una oruga perrocalentera en toda una mariposa social.

Dato curioso:

WARNING:Don´t try this at home. Sólo en tarantines insalubres:

- Pídele al perrero que te prepare un "perro huérfano" y me avisas que tal te fue.